Contados son los casos en el deporte mundial que registran un invicto perpetuo, algo o alguien que nunca conoció la derrota ni la conocerá en su actividad profesional. Como, por ejemplo, el caso de Floyd Mayweather Jr., quien nunca supo lo que era ser vencido en un ring de boxeo, luego de pelear 50 combates y ganarlos todos.
Claro, las pocas apariciones que tienen los pugilistas en el cuadrilátero hacen más propicios este tipo de récords. No se pueden comparar con otras disciplinas en la que la actividad es más constante. Como el caso de un equipo de la NBA, el cual juega 82 partidos solo en una temporada regular. A pesar de ello, no dejan de ser motivo de admiración todos aquellos que no probaron el amargo del perder.
Sin embargo, yéndonos al ámbito de la existencia en toda su dimensión, encontramos algo que deja el logro de Mayweather en pañales. Se trata de la muerte, el contrincante que ha enfrentado a toda clase de vida durante milenios y siempre se ha levantado airosa con la victoria.
Por tal motivo, al humano le resulta tan fascinante la historia bíblica de Lázaro y mucho más en días de Semana Santa. Aquel relato que sugiere el regreso a la vida de este hombrecillo, luego de que Jesús de Nazaret le ordenara levantarse de su sepulcro, aún envuelto entre las vendas que le decoraban por el final de sus días.
En el segundo semestre del 2023, Junior de Barranquilla vivió en carne propia lo que sintió aquel amigo de Jesús. Caminó por el valle de los muertos en el fondo de la tabla. Pero, luego del milagro de la resurrección, vino el gozo de la consagración, desatando en el resto del país una profunda desazón.
Hoy, una fila de ‘lázaros’ se alinean justo detrás del ‘Tiburón’ en la tabla de posiciones. Independiente Medellín, Millonarios, América de Cali y Atlético Nacional, cuatro grandes que fueron declarados casi muertos, ahora se aferran al milagro de las matemáticas y se acercan a la posición del ‘Rojiblanco’.
Aunque el equipo de Arturo Reyes aún tiene duelos con dos de estos equipos en su calendario (los ‘Escarlatas’ y el ‘Embajador’), Junior no podrá controlar lo que pase con estas escuadras en los compromisos que les restan y mucho menos con los casos del ‘Verde’ y el ‘Poderoso’.
Sin embargo, sí puede controlar su propia suerte y ganar la mayor cantidad de cotejos significaría una ventaja deportiva contra alguna de estas escuadras en un eventual cruce en finales. Un dato no menor, pues la historia no miente, estos son los equipos que al final terminan peleando campeonatos. No importa cómo entren.
Así que, si los ‘Lázaros’ resucitan, lo mejor es no estar cerca del sepulcro.