Al hincha de Junior siempre le ha gustado la dinámica de sacar cuentas premeditadamente. No importa cuántas veces falle en sus predicciones, una y otra vez volverá a ir a la tienda del cachaco, comprará un par de baterías, regresará a su casa para ponerlas en la calculadora y hará los cálculos que coloquen al ‘Tiburón’ en la siguiente fase del torneo que esté disputando.
La mitificación de la matemática es una práctica recurrente en el juniorismo, a pesar de que muy pocos le aciertan a las operaciones.
Un fracaso numérico que se debe a muchas variables. Pero, la principal es que dan por sentado que su equipo ganará todos los partidos que enfrente de local. La segunda es identificar al rival más “débil” de la zona y decir: “aquí están los tres puntos de visitante”. Listo, la clasificación está resuelta.
Ya no es necesario que Arturo Reyes analice estrategias, esquemas, movimientos, tácticas, etc. para conseguir el objetivo, pues los hinchas lo resolvieron en menos de diez minutos en su dispositivo.
Sin embargo, es de gran gusto para el aficionado cometer un gran error. A pesar de que en el fútbol hay tres resultados, se tiende a contemplar solo la victoria y la derrota, ignorando casi siempre la posibilidad del empate, que es el que casi siempre descuadra todas las cuentas.
Precisamente en esta edición de la Copa Libertadores, el ‘Tiburón’ se ha contagiado de una ’empatitis’ y esto le ha revuelto los cálculos a sus seguidores.
Muchachos, no pierdan más el tiempo. Esto es fecha a fecha. Partido a partido. Todos los cotejos son distintos y cualquier cosa puede pasar. No den por hecho que Junior perderá en Quito con la Liga. No den por hecho que Junior le ganará a Botafogo en Barranquilla.
Tampoco desestimen el empate, que en él también hay magia. Imaginen que todos los partidos que sobras del Grupo D terminen en empate y la tabla no se mueva. Sería infartante, pero maravilloso.
Entonces no se den mala vida. Apaguen la calculadora y mejor contemplen el reloj. Así calculan las horas que faltan para disfrutar, ojalá que sea así, del fútbol del ‘Rojiblanco’.
