El icónico Carlos Alberto Valderrama dejó una huella imborrable en la historia del fútbol sudamericano durante los años 90. Su talento y precisión llevaron a la selección colombiana a una hazaña sin precedentes: clasificar consecutivamente a tres ediciones de la Copa del Mundo, un logro inigualable para Colombia en esa década dorada del fútbol nacional.
Este logro, que incluyó la icónica victoria por 5 a 0 ante Argentina en 1993, marcó una época dorada para el fútbol colombiano. Incluso la selección dirigida por Néstor Pékerman en el Mundial de Brasil 2014 no pudo igualar esta gesta, aunque lograron destacarse al alcanzar los cuartos de final.
Además de brillar en la escena internacional, el samario dejó su huella en la Major League Soccer (MLS) de Estados Unidos, defendiendo los colores del Tampa Bay Mutiny, el Miami Fusion F. C. y el Colorado Rapids. Más de dos décadas después, la revista especializada en deportes Four Four Two lo destacó como el tercer mejor futbolista de la década de los 90 en la liga estadounidense.
Con su característico cabello rubio y su estilo elegante en el campo, el eterno capitán de la ‘Tricolor’ se convirtió en uno de los jugadores más emblemáticos de la MLS. Ganó el premio al Jugador Más Valioso (MVP) en la temporada inaugural de la liga y fue nominado nuevamente al año siguiente. Además, fue parte del XI Mejor de la MLS en 1996 y 1997, y contribuyó a la conquista del Supporters’ Shield de 1996 con el Tampa Bay Mutiny.
La influencia de Valderrama en el fútbol estadounidense sigue siendo recordada y celebrada hasta el día de hoy, destacando su impacto duradero en el deporte y su legado como uno de los grandes íconos del fútbol colombiano.
👏👏👏👏💛💙❤️ se merece eso y mucho más nuestro gran pibe💪💪💪