Con motivo del duelo de alto calibre que estará enfrentando Junior de Barranquilla próximamente con Botafogo en el marco de la Copa Libertadores 2024, El Heraldo ha hecho una recopilación bastante precisa de los nombres, muy buenos nombres, de futbolistas que han vestido las camisetas de ambos equipos.
Entre tantas grandes figuras que el medio destacó en su portal, sobresale uno de los jugadores más importantes que ha tenido la institución rojiblanca en sus casi 100 años de historia.
Se trata del brasileño Heleno de Freitas, un legendario jugador brasileño que se destacaba por su gran capacidad goleadora, pero que su particular estilo de vida, marcada por una personalidad conflictiva y el excesivo gusto por los juegos, las drogas y las mujeres, le grabaron en la historia como un personaje icónico que inspiró una buena cantidad de obras.
El particular personaje, que murió a la temprana edad de 38 años (año 1959), fue contratado por el equipo barranquillero en el año 1950, cuando los ‘Miuras’ regresaban al campeonato profesional colombiano tras cumplir la sanción impuesta por Dimayor, luego de que el club representara a Colombia en el Campeonato Sudamericano de Río de Janeiro, Brasil, por petición de la Adefutbol.
La llegada del brasileño se dio gracias a Mario Abello, entonces presidente del equipo, quien emprendió un viaje a Río de Janeiro a principios de año en busca de refuerzos. Fue allí donde contactó al ‘Gitano del fútbol’, cuya llegada a Barranquilla el 13 de marzo de 1950 marcó un precedente en la historia del club.
Su debut con el onceno caribeño tuvo lugar el 26 de marzo contra el Atlético Bucaramanga (0-0). Sin embargo, fue en el ‘clásico costeño’ contra el Sporting donde de Freitas dejó su primera huella al anotar un gol que contribuyó a la victoria 3-2 de los ‘Canarios’.
Pero, uno de los momentos más memorables de su corta estancia en Barranquilla fue el enfrentamiento contra Millonarios el 4 de junio, donde Heleno lideró un contraataque desde la mitad de la cancha y anotó un gol que deslumbró a la afición, humillando al prestigioso ‘Ballet Azul’ de Alfredo di Stefano y Adolfo Pedernera.
Luego, la revancha, la última fecha del campeonato, tendría que jugarse en la capital del país, el equipo comandado por Heleno logró obtener un importante empate contra los bogotanos, a pesar de la necesidad imperiosa del equipo rival de obtener la victoria, pues una victoria les hubiese permitido empatar en puntos al Deportes Caldas (hoy Once Caldas).
De esta manera, a ese Millonarios, uno de los mejores equipos que ha tenido el FPC, se le escapó aquel título, el único que no ganaron en cinco años, pues en 1949, 1951, 1952 y 1953 dominaron a gusto y placer el certamen. Sin embargo, un año se les cruzó de Freitas en el camino y les dañó el ballet.
