Después de la victoria ante Botafogo en la Copa Libertadores, Junior de Barranquilla se prepara para enfrentar un clásico del Fútbol Profesional Colombiano (FPC). El equipo se dirigirá a la capital del Valle del Cauca para enfrentar al América de Cali con una alineación muy diferente a la que ganó en Brasil.
Esta situación se debe a la doble competencia que el ‘Tiburón’ está enfrentando bajo la dirección técnica de Arturo Reyes. Después de iniciar su participación en la fase de grupos del certamen internacional el 3 de abril, ahora, el 6 de abril, jugará en Cali contra la ‘Mechita’.
Y eso no es todo, el 9 de abril estará de vuelta en la ‘Arenosa’ para enfrentarse al Universitario de Perú. Por lo tanto, la necesidad de realizar cambios en la alineación será evidente en el partido en el estadio Pascual Guerrero.
El equipo que saldrá a la cancha será alterno, compuesto principalmente por jugadores que han sido suplentes durante el 2024. Su responsabilidad en este caso será acercar al equipo a la clasificación para los cuadrangulares.
Entre los convocados, resalta la presencia del defensa argentino Nicolás Salazar, una incorporación que hizo el club hace unas semanas de emergencia por la inesperada lesión de Rafael Pérez.
Sin embargo, el zaguero gaucho no había sido convocado, pues, desde que llegó, presentaba un cuadro de dengue, enfermedad transmitida por la picadura de mosquito que le imposibilitó entrenarse con la plantilla y ser tenido en cuenta para los compromisos.
Ahora, en su primer llamado, los hinchas del equipo han sacado a relucir su ingenio y ya le han puesto un sobrenombre. El ‘Dengue Salazar’, así es como están llamando a este futbolista, quien no se salvó del popular ‘perrateo’ que caracteriza a las personas de la Región Caribe y muy difícilmente se desprenderá de ese apodo.